Deciphering Spanish Food Ads
El valenciano que no sabía hacer paellas, anuncio 2016. Arroz Dacsa
In the same way that novels, songs, presidential speeches, and social network messages can be used to get insight and understand the mood of generations, countries, and people, Spanish food advertising can give us a powerful insight into the prevailing mood and our relationship with food.The biggest budgets in Spanish advertising are often reserved for food and drink, given our obsession, especially with embutidos or charcuterie, of which we are the largest consumers in the world.
Every Christmas, it is customary for companies like Navidul and Campofrio, manufacturers of embutidos (charcuteries) to produce commercials to reflect on the issues of the moment so this year the effects of the pandemic were on the plate. In the past ads have concentrated on the economic crisis, the nationalists spats and fake news. The Campofrio ad for 2013 titled “The Curriculum of All of Us” featured famous clown Fofito aided by comedians, journalist and other famous people create the CV of all Spaniards as a remedy to the nefarious psychological effects of the crisis and sending Spanish embutidos along with the CV in packages to the International Monetary Fund, Angela Merkel and Moody’s among others. The part about the elderly lady that shares her small pension with her children and grandchildren inevitably always brings tears to my eyes.
One of the most popular ads this past Christmas was a fun take (parody) on all the cooking experiments people have done over the pandemic lockdowns as Spaniards have become more “cocinillas” or little cooks and asking them to simplify this Christmas by serving (of course!) iberico products #SaboreemosLoSencillo (taste the simplicity). These were based on the summer ads “Chef Pro’’ which poked fun at all the Ferran Adrià disciples making spherifications and other culinary experiments with disastrous results. The December ad shows cooks attempting impossible recreations of avant-garde recipes, cook’s and kitchens covered with baking flour, burning ovens and exploding roasted peppers, scenes where some of us will surely see ourselves reflected.
The cooking mania that has taken over us as a result of COVID is felt across the world but the response to its woes is 100% Spanish: iberico ham, rest and enjoyment. Iberico pig – an autochthonous breed of pigs native to Spain – is the pinnacle of gastronomic experiences for any us Spaniards, irrespective of region, football team, gender, age or economic situation. A kilo of prime iberico ham can set you back 100 euro. Where else in the world can you really celebrate anything memorable with a plate of iberico ham and a glass of fino sherry? A plate of iberico or serrano ham is traditionally a prelude to the traditional Christmas Eve dinner of every Spaniard.
This January and February 2021 we will be presenting a series of online workshops on Spanish Food culture through art, TV ads, sayings and expressions (dichos y refranes) and movies.
We will analyze paintings from El Prado museum, perplexing expressions about food like “que te den morcilla!” (may you be given black pudding but in reality get lost!) and why the Basque terrorists in the TV show Fe de Etarras (Bomb Scared) fight about the type of almond used in the traditionally Basque pantxineta tart (nibbed vs. sliced) among many other topics.
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Lo mismo que las novelas, canciones, discursos presidenciales y los mensajes en redes sociales se pueden utilizar para entender el estado anímico de las distintas generaciones, países y gentes, los anuncios de televisión sobre alimentos y bebidas nos dan las claves del estado de la cultura gastronómica y nuestra relación con la comida. Los mayores presupuestos en el mundo de la publicidad se reservan a menudo para los anuncios de alimentos y bebidas, dada nuestra obsesión por ellos; en especial, los embutidos de los que los españoles somos los mayores consumidores del mundo.
Cada Navidad es usual que Navidul y Campofrío —dos empresas de embutidos— realicen anuncios que reflejan las inquietudes del momento, por eso este año los efectos de la pandemia están sobre el plato. En el pasado, los anuncios se han concentrado en la crisis económica del 2013, las peleas de los nacionalismos y las noticias falsas. El anuncio de Campofrío de 2013, titulado “El curriculum de todos”, fue protagonizado por el payaso Fofito, que ayudado por comediantes, periodistas y otros famosos decide escribir el curriculum de todos los españoles como remedio a los efectos psicológicos de la crisis y enviarlos, acompañados de embutidos españoles, en paquetes al Fondo Monetario Internacional, a Angela Merkel y a Moody’s, entre otros. La parte sobre la señora mayor que comparte su pensión con sus hijos y sus nietos siempre, inevitablemente, me obliga a contener las lágrimas.
Unos de los anuncios más populares de esta pasada Navidad fue una parodia de los experimentos culinarios realizados en casa durante los confinamientos por la pandemia, en la cual, los españoles se han vuelto más “cocinillas” con el objeto de simplificar las Navidades sirviendo (por supuesto) embutidos Ibéricos (#SaboreemosLoSencillo). Este anuncio estaba basado en otros, emitidos el verano pasado y titulados “Chef Pro”, que bromeaban sobre los discípulos de Ferran Adrià haciendo esferificaciones y otros experimentos culinarios con resultados desastrosos. El anuncio del pasado diciembre muestra cocinillas intentando realizar platos imposibles de la alta cocina: cocinas cubiertas de harina, hornos incendiados y pimientos que explotan; escenas en las que algunos de nosotros nos vemos reflejados.
La manía culinaria que se ha apoderado de España —como resultado de la COVID-19— se ha sentido en todo el mundo, pero la solución es jamón ibérico, descanso y disfrute 100% español. El embutido del cerdo ibérico —una raza autóctona de España— es la cumbre de las experiencias gastronómicas para cualquiera español, sin tener en cuenta región, equipo de fútbol, sexo, edad o situación económica. Un kilo de jamón ibérico de primera calidad te puede costar hasta 100 euros. ¿En qué otro sitio del mundo se celebra un evento memorable con un plato de jamón y un fino? Un plato de jamón ibérico o serrano es un preludio de la tradicional cena de Nochebuena para la mayoría de los españoles.
Este enero y febrero presentaremos unos talleres en línea sobre la cultura gastronómica española a través del arte, los anuncios, los dichos y refranes, y las películas. Analizaremos las pinturas gastronómicas del Museo del Prado, dichos confusos como “¡Que te den morcilla!” y porqué los terroristas vascos en Fe de Etarras —una serie de TV— se pelean al discutir sobre el tipo de almendra que se utiliza en la pantxineta vasca, entre otros muchos temas.
Blog written for the Cervantes Institute.
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